Ermita de la Bastida en mitad del pinar - Foto: ciudaddelastresculturastoledo.blogspot.com |
La ermita se halla rodeada por un pinar, principalmente de pino carrasco, a diferencia de unas fotografías que hemos podido contemplar, en la web Toledo Olvidado, de los años veinte del siglo pasado, en las que se puede apreciar como el paraje se encontraba totalmente yermo; aunque a diferencia del criterio del autor de esta magnífica web, de la que somos seguidores, entendemos totalmente negativo reforestar un lugar con especies que no sean propias del bosque autóctono del lugar de que se trate. Nos hubiera gustado más contemplar dicho templo rodeado de encinas, pero esto es adentrarnos en temas ajenos a la temática de este blog. Desde aquí recomendamos, no sólo la visita a este enclave, sino una ruta por todos Los Cigarrales y cerros que rodean por el Este, Sur y Oeste a la ciudad de Toledo, en la orilla opuesta del río Tajo.
Para finalizar diremos, ya que ilustramos la ficha con el escudo de la ciudad en la que nos encontramos, que gracias a una buena acompañante, a la que tuvimos el gusto de conocer en dicha ruta, supimos que se dice que la propia visión de Toledo, desde la zona de la Ermita de la Virgen del Valle, lugar por el que igualmente cruzamos, se asemeja al águila del escudo -o más bien se podría decir lo contrario, que es el escudo el que se asemeja a la ciudad-, en la que la cola de éste sería el barrio toledano de La Cornisa, mi barrio predilecto de la ciudad de Toledo, pues es el único que verdaderamente se une a su mítico río, el de más largo recorrido en la Península Ibérica, además de por la tranquilidad que se percibe en sus calles, como si de un pueblo, dentro de la ciudad de Toledo, se tratara.
Cueva de la Ermita de la Bastida - Foto: ciudaddelastresculturastoledo.blogspot.com |
Toledo siempre tan sorprendente. A mí esta ermita me ha recordado un poco a la misteriosa y tristemente abandonada a su suerte, ermita de San Jorge en la ciudad de Cáceres.
ResponderEliminarUn saludo.
Buenas, Placentino. No conocía la ermita de la que hablas, únicamente la plaza de San Jorge y la iglesia que hay en la parte superior de la escalinata, que en un principio creí que estaría consagrada al mismo santo, con tantas reminiscencias de mitos paganos, en lo que se refiere a la lucha del héroe y la bestia, en este caso San Jorge y el dragón, pero ya descubrí después, después de mi primera visita a Cáceres, que no, que estaba consagrada a San Francisco Javier. He estado mirando en internet sobre la Ermita de San Jorge y, pese a su aspecto ruinoso, se ve espectacular. Me ha llamado la atención verla inundada, aunque he leído que se hizo un estanque en ella, de ahí que se inunde, lo cual le da gran misterio al asunto, pues yo, al menos, no había oído nunca un caso igual de un estanque artificial en un templo cristiano. Espectaculares también las pinturas murales que he podido apreciar en distintas fotografías. Una joya así no debería caer en el total abandono. Un abrazo, amigo.
ResponderEliminarVerdaderamente es una pena. Al parecer varios murales ya se han perdido y debería actuarse de inmediato para conservar el lugar como merece serlo. Parece mentira que después del expolio de las pinturas románicas de la ermita de San Baudilio de Berlanga, en Soria, aun no hayamos aprendido nada.
EliminarUn saludo, amigo.
Cierto, me ha sorprendido ver dichas pinturas así, en total abandono, a día de hoy, cuando se supone que hay más cuidado con estas cosas.
EliminarOtro saludo.