Este mito, que puso a la Península Ibérica dentro del acervo cultural heleno a través de su mitología, forma parte de ese conjunto de mitos característicos de distintas civilizaciones de la Antigüedad que no son otra cosa que la inclusión de unas tierras extrañas dentro de su propio ámbito de influencia. Suponen, por tanto, una invitación a sus propias gentes a aventurarse en la colonización de un determinado territorio al que llegaron con anterioridad sus propios dioses y héroes y, por tanto, pacificaron en cierto modo para ellos. Naturalmente esto únicamente ocurre con aquellas lejanas tierras que esconden algún importante interés, en este caso la gran fama en riquezas minerales que ostentaba la península -el extremo más occidental de la oikoumene- y su legendario reino de Tartesos, con lo que a partir de ese momento los griegos comenzaron a llegar a la península y fundar colonias, lo que ya habían comenzado hacer, quizás unos siglos antes, otro pueblo del Mediterráneo oriental, los fenicios.
Escultura de "Los Hércules y la Unión del Mundo" de Ginés Serrán en Ceuta. Vista del Peñón de Gibraltar al fondo. Foto de J. Sarrià. |
*Fuente: blog.educastur.es
Las Columnas de Hércules fueron un elemento legendario de origen mitológico, situado en el estrecho de Gibraltar y señalaba el límite del mundo conocido, la última frontera para los antiguos navegantes del Mediterráneo. Los griegos aunque conocían bien el mar Mediterráneo, sus conocimientos sobre el Atlántico ya eran más limitados.El nombre más antiguo es: Estelas de Heracles que luego los romanos cambiaron.
En un arrebato de locura Heracles (Hércules) había matado a sus hijos. Recobrada la razón, el Oráculo de Delfos le había indicado que para purificarse, debería estar al servicio del rey de Tirinto, Euristeo, durante doce años. Habiendo llegado al monarca la fama de los bueyes de Gerión, ser fabuloso que poseía tres cuerpos y que moraba en el Lejano Occidente, y aprovechándose que aún no habían expirado los doce años de servicios, encargó a Heracles que capturase dichos rebaños.
El viaje de ida, antes de llegar a Eriteia (una de las antiguas islas sobre las que actualmente se asienta la ciudad de San Fernando), fue pródigo en aventuras y luchas de todo tipo, hasta el extremo que “para conmemorar sus hazañas fueron elevadas las columnas que llevan su nombre, que separan Europa de África”. Heracles tomó prestada la Copa de Helios para navegar sobre el océano y llegar a la tierra de Gerión. Mató a éste y regresó al reino de Euristeo con el ganado. Fue Hércules quien separó las dos rocas para abrir el camino al océano Atlántico.
Discrepo de tu artículo en algunas de las afirmaciones que haces.
ResponderEliminarPrimero, hablas de colonización griega, cuando esto conlleva la ocupación efectiva de un territorio y la transformación de este con dependencia de la metrópoli, Grecia no hacía esto, cuando creaba una población eran independiente de su ciudad de origen.
Por otro lado Grecia nunca llegó tan al Sur de la Península Ibérica, por lo tanto no tiene razón de ser tu hipótesis de que la denominación "columnas de Heracles" era para "una invitación a sus propias gentes a aventurarse en la colonización de un determinado territorio al que llegaron con anterioridad sus propios dioses y héroes".
Y una más, como que "ya habían comenzado hacer, 'QUIZÁS' unos siglos antes, otro pueblo del Mediterráneo oriental, los fenicios", está más que probado que los fenicios ya tenían asentamientos en la zona andaluza, es más, tenían asentamientos desde la zona de no influencia griega en el Sureste de la Península.
Te recomiendo:
DOMINGUEZ MONEDERO, A. "Los griegos en la Península Ibérica". Madrid, 1996.
ALVAREZ MARTI-AGUILAR, M. "Fenicios en Tartessos: nuevas perspectivas. Madrid, 2011.
Lo siento es que cuando me tocan a mis fenicios sale mi lado de leona ;).
Vaya repaso, María Engracia jaja, muchas gracias por tus aclaraciones y la bibliografía aportada, tomo nota.
EliminarTienes toda la razón, hay que hablar con propiedad. En el caso de las fundaciones griegas sabía que eran ciudades independientes, pero me he dejado llevar por la mala costumbre existente de llamarlas colonias, de ahí mi uso incorrecto del término colonización.
En cuanto a que los griegos no llegaron tan al sur, pues es posible, porque esa zona la controlaban los fenicios, pero sí tenían conocimiento de la existencia del Estrecho y del océano, de donde pudo nacer el mito de Heracles, Gerión y las columnas, a pesar de no haber fundado ciudades en esa zona.
Las leyendas creadas por distintas civilizaciones en lugares extraños (en este caso era un lugar extraño para los griegos, lo que ya no era para los fenicios) como reclamo para una futura exploración (lo cual no se acabó finalmente materializando para los griegos a pesar de la leyenda) es una conclusión que acabo de leer, de una manera general, en un libro titulado Tierras fabulosas de la Antigüedad de F. Javier Gómez Esptolín, Antonio Pérez Largacha y Margarita Vallejo Girvés y que he considerado, acertadamente o no, aplicable a este mito, a pesar de que no se produjera, que se sepa, finalmente la llegada de griegos a la zona.
Con el uso que he hecho, en relación a fenicios y griegos, de ese "quizás" no quería crear ninguna duda sobre quiénes llegaron primero, está claro que fueron los fenicios (siento haber traído a confusión por mi forma de expresarme), lo que no tenía claro era si fue cuestión de uno, dos o varios siglos, de ahí que haya dicho "quizás unos siglos antes". Entiendo, por tu puntualización, que debieron ser varios. Debería haberme documentado más al respecto para haber hablado con mayor certeza.
No te preocupes, no les tengo demasiada antipatía a los fenicios jaja, han sido muy importantes para la cultura occidental, con todo lo bueno y malo que pueda tener esta última.
Es todo un honor que hayas dedicado parte de tu tiempo a este humilde blog. Gracias de nuevo.
Un saludo y encantado
Yo lo que sé es que Hércules las derribó, pero metafóricamente hablando, porque en realidad se supone (por mí), que Hércules no derribó las columnas de verdad sino que fue como si abriera una puerta entre las conocimientos de occidente y el resto del mediterráneo, porque es como si antes no se supiera nada de el resto del mundo.
EliminarEsto esta escrito por un alumno de 4º ESO.
Si eres de 4º de la ESO y ya reflexionas de esa manera, te animo a que continúes con esta pasión por conocer el pasado, la humanidad te lo agradecerá.
EliminarUn saludo
Así da gusto comentar las cosas :).
ResponderEliminarLo mismo digo, Mª Engracia, aportaciones como la tuya le animan a uno a seguir haciendo fichas de éstas en el blog.
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