Volvemos a bucear en la rica mitología vasca. Y cuando hablamos de mitología vasca, siempre, o casi siempre, aparecen las montañas como protagonistas. Hoy nos acercamos al macizo de
Aizkorri, al pico de su mismo nombre dentro de este conjunto montañoso, con 1528 metros de altitud. Junto a este pico, en un
dolmen de nombre
Tártaloexte, del que no hemos encontrado ninguna imagen, tiene su morada el
gentil -aquellos gigantes deformes de la mitología vasca-
Tártalo, de ahí el nombre del propio megalito como "
casa de Tártalo". Muy cerca, en el
monte Aketegi, también perteneciente al
macizo de Aizkorri, tiene la diosa
Mari otra más de sus moradas. En la cima del
Aizkorri se construyó la
Ermita del Santo Cristo, lo que nos da una prueba más de encontrarnos ante una antigua montaña sagrada, pues ya sabemos que este tipo de templos u oratorios no se levantaban aleatoriamente y menos en lugares de difícil acceso, como es la cumbre de una montaña.
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| Cima del Aizkorri y Ermita de Santo Cristo, con Peña Aratz emergiendo al fondo sobre un mar de nubes. Foto: deviajeporeuskadi.com |
Fuente: Montañas sagradas en el País Vasco y su mitología - María Constanza Ceruti
Los megalíticos característicos del paisaje arqueológico de Euskadi aparecen en la mitología vasca como estrechamente vinculados a los míticos “gentiles” a quienes se caracteriza como gigantes -usualmente deformes- que moran en las montañas. “Tártalo”, un gentilemparentado con los cíclopes de la mitología
mediterránea, tiene su morada en un dolmen en el macizo de Aizkorri, cuya cima de 1528 metros constituye la máxima elevación de Guipuzkua. El paraje asociado con dicho megalito recibe la lógica denominación de Tártaloexte (“casa de Tártalo”). A la toponimia se suman los relatos folklóricos: el gentil Tártalo ha sido avistado personalmente por una anciana que pastorea en la región (Luis del Río, comunicación personal).
Según la leyenda que se cuenta en la ciudad de Castellón de La Plana, la ciudad fue fundada por el gigante Tombatossals, que era hijo de dos montañas y habitaba en las islas Columbretes. Todos los niños castellonenses conocen la historia del gigante Tombatossals (yo mismo la escuche allí durante mi infancia).
ResponderEliminarMe ha parecido bonito comentarlo aquí para evidenciar las similitudes entre las diferentes mitologías ibéricas.
Saludos Argantonios.
Por cierto, Miguel, no sabía que hubieras pasado tu infancia, o parte de ella, en Castellón. Esas leyendas calan de verdad cuando se conocen desde niño.
EliminarOtro saludo.
Sí, Argantonios. Salí de Extremadura siendo muy niño y pasé mi infancia en Castellón hasta que me vine a tierras alicantinas. Tal vez por ello, no tengo un claro sentimiento de pertenencia a ningún lugar en especial. Me interesan todas las tierras de Iberia.
EliminarSalud amigo!
El haber vivido en dos sitios del mismo entorno cultural, pero distintos, y tener raíces en lejanas tierras extremeñas, donde yo también las tengo, a pesar de que no nací allí, ni viví nunca allí, como creo haberte contado en alguna ocasión, evidentemente te hacen tener una visión más global de la Península. A mí me pasa un poco como a ti. Nací en Alemania y allí estuve casi hasta los 5 años de edad, pues fui hijo de la emigración que se hizo a aquel país, desde aquí, en los años 60 y 70 y luego viví toda mi vida en la provincia de Madrid, hasta el momento, pero teniendo raíces por parte de familia en otro sitio, con lo que estoy en una situación parecida a la tuya.
EliminarYo en cierto modo me siento un desterrado, a pesar de haber hecho mi vida en este entorno y ser realmente de aquí, pero sé que si esa estrategia estatal-capitalista de arrastrar a la gente del campo a la ciudad, proyecto que intentaron los distintos regímenes que se sucedieron, se vistieran del color del que se vistieran, no hubiera triunfado finalmente, estaría en el lugar que me correspondería, como tantas otras personas. No caigo, evidentemente, en el pesimismo, pues es lo que nos ha tocado y, aunque hay gente que lucha por revertir la situación, cual no es mi caso, cierto es, intento adaptarme a lo que nos ha tocado, a pesar de que suene a cierto conformismo, lo cual es peor si tienes consciencia de ello, pero bueno, ya estemos donde estemos, podemos poner igualmente nuestra granito de arena, eso está claro.
Gracias por responder a mi comentario, amigo.
Estoy de acuerdo con tu comentario Argantonios. De no haber sido "victimas" (entre comillas) de la emigración, (la mia interior, la tuya exterior) hubiéramos pasado nuestra vida en el lugar de nuestros antepasados, pero esa migración forzada (que no elegimos) también creo que nos ha hace ver el mundo de otra manera, mas abierta (o mas global, como bien dices) lo cual es muy bueno. Cuando iba a Extremadura era valenciano y en Levante era el extremeño, ese desarraigo que hace no sentirte de ningún sitio, en realidad te permite sentirte de todos, lo cual resulta muy sano porque te hace ver que lo importante no son los territorios sino las personas. Esta es mi opinión.
Eliminar¡Salud!
Te entiendo, Miguel y respeto tu opinión, faltaría más, aunque por una vez, y sin que sirva de precedente jaja (aunque el debate constructivo, partiendo de opiniones distintas, es siempre enriquecedor), discrepo en parte, pues estoy bastante de acuerdo con un dicho que dice que "lo que no tiene raíces, se lo lleva el viento", que no digo que sea tu caso, por supuesto, amigo, pero desde mi punto de vista el arraigo es siempre positivo, cuando no es excluyente, evidentemente, nunca para caer en el chovinismo, eso es lo peor que pueder ocurrir, algo que a los Estados se les da muy bien promover. Yo desde ese punto de vista soy muy localista, siempre me atrajeron las "fronteras" naturales, que no las políticas (o más bien habría que llamar estatales), de ahí que en el blog casi siempre prefiera ubicar a los distintos pueblos o localidades que voy trayendo en sus respectivas comarcas y nunca en las provincias, salvo en el caso portugués, que al no conocer sus comarcas, a veces los ubico en sus correspondientes distritos (lo equivalente a las provincias en el Estado español), salvo cuando creo una etiqueta para compartir la entrada en facebook o en twitter, que ahí sí suelo señalar, a veces, la provincia de pertenencia.
EliminarEn lo que sí estoy de acuerdo es en que el desarraigo, por sí mismo, no tiene por qué ser negativo, pero sólo cuando es algo elegido, con verdadera libertad, por uno mismo, pues creo que la mayor parte del desarraigo actual ha sido provocado desde arriba y no a elección de las personas, por mucho de que parezca que vivimos donde queremos, pero en la práctica, al final, la coyuntura económica, a nivel general (hay evidentemente excepciones) impuesta desde esferas que nos son ajenas a la mayoría de la población, nos obliga a vivir en unos sitios u en otros.
Pero vamos, Miguel, entiendo perfectamente el fondo de tu mensaje, lo positivo que tiene y desde ese punto de vista también lo comparto, por supuesto, lo que pasa que he querido manifestar otra opinión también para sumar, nunca para restar. Cuando el debate es constructivo, siempre se suma.
Un placer, amigo, poder hablar contigo, como siempre.
¡Salud!
Por supuesto amigo, el debate y la exposición de diferentes opiniones siempre es positiva.
EliminarUn saludo.
Por cierto, se me olvidó comentar una cosilla que va muy en la línea de tu opinión, y es que yo hablo desde el punto de vista sedentario, pero ya sabemos que esta etapa es mucho más corta en el tiempo, que todo lo que hubo antes cuando éramos nómadas y ahí sí que, ciertamente, éramos unos desarraigados por naturaleza, así que considero importante apuntar ese detalle, que va más en la línea de cómo tú te sientes, amigo.
EliminarOtro saludo.
Es verdad. No había caído en ese importante detalle que apuntas.
EliminarEl nomadismo, tiene un cierto carácter vinculado al concepto de libertad, que lo hace muy atrayente. Se me ocurre, por ejemplo, un fenómeno culturalmente muy importante en la peninsula ibérica; la transhumancia.
Salud!
Buena puntualización la que haces con la trashumancia, pues, aunque tiene que ver con la vida sedentaria, al estar relacionada con la ganadería, que junto con la agricultura, se empieza a practicar precisamente cuando el ser humano se hace sedentario, no deja de ser una forma de andar de un lugar para otro, buscando el sustento de su ganado, que según escuché en un programa de radio que hacía en los años 70 Félix Rodríguez de la Fuente y que pude escuchar a través de un podcast, no eran otras rutas que las que hacían esos propios animales antes de ser domesticados. Incluso hablaba del lobo, si no recuerdo mal, como animal que recorría esos mismos caminos a lo largo del año en busca de alimento, algo, esto último, que no resulta tan extraño si se sabe que el lobo y el hombre se alimentaban prácticamente de los mismos animales, de ahí que siempre fueran competidores, hasta que el primero se viera prácticamente abocado a la desaparición. Si encuentro ese audio sobre la trashumancia te lo pongo por aquí, Miguel, porque estaba muy interesante.
Eliminar¡Salud!
Aquí lo tienes, Miguel:
EliminarParte 1ª: https://www.ivoox.com/ganado-trashumante-1-2-felix-rodriguez-la-audios-mp3_rf_276334_1.html
Parte 2ª: https://www.ivoox.com/ganado-trashumante-2-2-felix-rodriguez-la-audios-mp3_rf_278672_1.html
Muchas gracias Argantonios.
EliminarNo sabía eso que comentas. Muy interesante. ¡Quien iba a decir que las cañadas reales fueron primero rutas animales!
¡Salud! y gracias por recordar al gran Félix.
Hola, Miguel. No tenía ni idea de la existencia de esa leyenda. Muy interesante, me lo anoto. Cuando escuchamos hablar de gigantes en la mitología, siempre nos viene a la cabeza la Gigantomaquia de la mitología helena, pero, como vemos, no sólo los griegos antiguos tenían mitos alrededor de gigantes, sino que aquí también los tenemos y seguramente sea un elemento coincidente en otras muchas culturas, no sólo europeas, sino seguro de culturas de otros continentes o, al menos, fuera del entorno Mediterráneo. Un fascinante mundo a estudiar, el de los personajes mitológicos en forma de gigantes en las distintas mitologías. Luego, volviendo a la mitología griega de nuevo, tenemos a un personaje creado por ésta, que asociaban a la actual Cádiz, como es Gerión, mito tan simbólico para esta península y que le relaciona con uno de los trabajos (el décimo) que tuvo que emprender el más que conocido Herakles, que tanta huella, en forma de leyendas, ha dejado también por aquí, sobre todo en el sur. La verdad que hay mucho que investigar en esa dirección.
ResponderEliminarMuchas gracias, de nuevo, por aportar tanto con tus comentarios, amigo.
Un fuerte abrazo.
Tienes razón amigo. El mas famoso gigante de la peninsula tal vez sea Gerión, rey de Tartessos además, si no me equivoco, cuya relación con Heracles llega incluso mucho mas al norte; a la coruñesa Torre de Hércules.
EliminarUn abrazo.
No sabía que la lucha de Hércules y Gerión llevara a este último incluso hasta La Coruña. He estado curioseando al respecto y he encontrado esto en celtiberia.net:
Eliminarhttp://www.celtiberia.net/es/biblioteca/?id=1484
Otro abrazo.
Gracias por el enlace Argantonios.
EliminarDada mi aficción (como sabes) a la heráldica, sabía que los huesos que aparecen en el escudo de La Coruña, corresponden a los del gigante Gerión y que acaso el único faro romano existente aun en pie (aunque muy modificado) no sea sino la maravillosa tumba de Gerión.
Es muy curioso e interesante investigar el origen mítico de las ciudades de Iberia. Por eso aprovecho para felicitarte por la ficha que dedicaste a la mágica ciudad de Toledo.
¡Salud!
Qué curioso dato lo del escudo de La Coruña, Miguel, lo que se aprende contigo, compañero. Me haré pronto eco en el blog de esa vinculación entre la ciudad gallega y un héroe tan "andaluz" como Gerión.
EliminarMuchas gracias por tu felicitación, me alegro mucho de que te haya interesado ese origen mitológico de Toledo, de los varios que tiene, pues ya sabes que también se dice que fue fundada por Hércules. Otra vez el sempiterno Hércules o Heraclés vuelve a aparecer.
¡Salud!