En los tiempos que nos ocupan, tanto Ilurco como Iliberis -actual Granada- eran las poblaciones más importantes, en esta zona de la vega del río Genil, de la antigua Bastetania. Pero adentrándonos en el tema central de esta entrada, debido a una serie de exvotos que representan las figuras de caballos se ha llegado a especular que posiblemente en la antigua Ilurco hubiera un santuario dedicado a este animal o una factoría de producción de exvotos sacros de este tipo.
Pinos Puente con el Cerro de los Infantes al fondo
Pinos-Puente se halla situado en las cercanías del Cerro de los Infantes, solar de la antigua Ilurco (Granada). Allí se encontraron también hace unos años abundantes placas de piedra caliza con relieves, grabados y esculturas de bulto redondo de caballos. ...Los exvotos de Pinos Puente se tallaron en su mayor parte con técnicas muy parecidas a las de Luque, en bajorrelieve y con los caballos en actitud de marcha hacia uno u otro lado, siendo característicos los cuellos de jirafa y las colas largas, delgadas y rectas o ligeramente ondulantes. ...Sobre el caballo en época ibérica, se han dicho ya muchas cosas tratando de penetrar en su significado profundo, o, más bien, en sus diversos significados, pues es preciso distinguir el que tiene en relación con el mundo de los vivos, con el de los muertos, y examinado en sí mismo. ...Considerado por último el caballo en sí mismo, desligado tanto de su valor social como de su papel heroificador, se ha tratado de ver en él ya a una divinidad o numen protector activo, destinado especialmente al cuidado de los caballos, ya en un papel pasivo, utilizado como símbolo, como exvoto o como simple ofrenda, aunque su sacrificio era muy raro, pues entrañaba una gran pérdida para su propietario y la comunidad. Habría que ponerlos en todo caso en función de su propia protección y la del jinete. La bebida de la sangre de los caballos, de la que expresamente hablan las fuentes, tendría un carácter mágico, y presupone, dice Blázquez, la creencia de que estos animales son sagrados, y sus cualidades pasarían a los que la bebieran.
("El caballo en la antigua Iberia", Fernando Quesada Sanz y Mar Zamora Merchán.)