Entre los iberos, las fuerzas superiores se comunican con los vivos a través de los antepasados y toman formas animales o humanas de dioses y diosas. Las representaciones aladas y el culto realizado en cuevas dan a entender que sitúan a sus dioses en la esfera celeste y en el mundo subterráneo. Existen espacios construidos para celebrar los cultos sagrados comunitarios. Su tipología se adapta a su emplazamiento, urbano o rural, y a la época de su construcción. En un primer momento son patios a cielo abierto y almacenes para las ofrendas y, más adelante, se construyen templos como El Cerro de los Santos.
(celtiberia.net)
El Cerro de los Santos estaba situado cerca de una ciudad llamada Ello (posteriormente Elo) cuyos restos se encuentran en el Llano de la Consolación. En la parte superior del cerro, con forma de planicie, se hallaba el templo, en su interior albergaba diversas esculturas.
En época de los romanos, al declarar Constantino I el Grande la religión cristiana como la oficial, el templo entró en declive hasta que en el año 399 Arcadio mandó destruir todos los templos gentiles de campos y ciudades. El templo del cerro de los santos fue quemado, habiendo quedado como huellas grandes masas de plomo derretido.
(Wikipedia)
No hay comentarios:
Publicar un comentario