viernes, 11 de mayo de 2012

El rito del herniado, Lobera de Onsella

Hace unos días, en un programa radiofónico, oí hablar de este ritual sanjuanista de claro tinte ancestral. En él se mezcla la antigua festividad del solsticio de verano, con el culto al árbol y un ritual curativo. Se conoce como El rito de herniado y se celebra en un bosque del pueblo de Lobera de Onsella, un municipio de la comarca aragonesa de Las Cinco Villas -Zinco Billas-. Esta comarca se extiende más o menos, a grosso modo, por lo que fue territorio de los antiguos suessetanos.
Pero volviendo a nuestro rito protagonista, dejemos que sea el etnógrafo Ramon Violant i Simorra quien nos cuente en qué consiste.

Lobera de Onsella















*Fuente: Ramon Violant i Simorra

En dicho pueblo hay un antiguo bosque sagrado cercado por una vieja tapia de piedra y lleno de robles frondosos. Cerca de él se halla una ermita dedicada al Bautista. La víspera de San Juan se abren a hachazos tantos robles jóvenes como sean los enfermos que calculan que han de acudir, y por la noche encienden una gran hoguera ante el pórtico de la ermita. Ya desde el atardecer se han reunido en ésta los enfermos, y puede verse el presbiterio lleno de niños enfermos que duermen sobre el suelo, en espera de la medianoche, hora mágica en que desciende al bosque la virtud sobrenatural. A las doce en punto, el párroco, revestido de sobrepelliz, entona una salve a San Juan, la cual es cantada por todo el pueblo, que llena la reducida ermita. Acto seguido, los concurrentes se trasladan en romería al bosque, y a la luz de faroles, comienzan las operaciones de curación. Los niños enfermos se desnudan completamente, para que el rito logre mayor virtud. Dos hombres mantienen bien abierta la hendidura del árbol. A un lado se coloca el "Pedro", que lleva el niño en brazos, quien después de santiguarse en nombre de la Santísima Trinidad, lo entrega a "Juan", que lo devuelve, repitiéndose la operación tres veces, recitando cada una de ellas la fórmula mágica tradicional: - Tómalo, Juan. - Dámelo Pedro. - Herniado te lo doy. - Sano te lo entrego. El poder milagroso del bosque se extingue con los primeros rayos del sol. El "Juan" y el "Pedro" que ofician en la ceremonia ejercen este oficio por tradición y gratuitamente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario