domingo, 6 de noviembre de 2016

Volcà de Santa Margarida, Santa Pau

En el municipio de Santa Pau, en la comarca catalana de La Garrocha -o Garrotxa- y en pleno Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrocha nos encontramos con el magnífico Volcán de Santa Margarida. Su última erupción se dice fue hace unos 11000 años, habiendo quedado el cráter sellado con el transcurso del tiempo y existiendo sobre éste una ermita románica que nos sirvió como indicio para rastrear posibles cultos más antiguos en aquel enclave, pues su contemplación desde arriba nos hace imaginar que no pasaría desapercibido para antiguos moradores. La altiplanicie formada se encuentra totalmente protegida y rodeada en círculo por las propias paredes del cráter, lo que le otorga un gran aislamiento, tan propio en muchos de los lugares de reunión y de culto en la Prehistoria y Antigüedad. De este modo nuestras sospechas se han confirmado en una información que hemos encontrado de Jesús Ávila Granados sobre el Parque Natural mencionado, en la que se dice que la ermita se construyó sobre un dolmen y también se habla de la existencia de un menhir del que hemos encontrado una fotografía. Igualmente comenta que nos encontramos ante un "lugar de culto prehistórico de corte céltico", afirmación quizás arriesgada, pues si bien algunas de las distintas oleadas de celtas que fueron llegando a la Península Ibérica, de más allá de los Pirineos, durante el I Milenio a. C, cruzaron por Cataluña, instalándose, quizás, algunos de estos grupos en este territorio, no hemos de olvidar, por otra parte, que nos encontramos en territorio de influencia íbera, a caballo entre las etnias de los indigetes, ausetanos y castelanos.

Ermita de Santa Margarida - Foto: lacasitaconruedas.wordpress.com

Fuente: Tierra salvaje de lava. Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa - Jesús Ávila Granados

El sendero se hace cada vez más empinado, en medio de un frescor y una arboleda tan espesa que impiden la entrada de los rayos solares; después de unos
17 minutos, alcanzará la cumbre, en este caso los labios del volcán, cuyo cráter —de 430 m de diámetro, en forma de circo y de 153 m de profundidad máxima, segundo en importancia de Europa, después del Etna—, reviste un formidable atractivo paisajístico; en su interior, una ermita románica levantada sobre un antiguo centro de culto prehistórico de corte céltico; un menhir da fe de ello, y también si recordamos que la iglesia se asienta sobre un gigantesco dolmen, como lo confirmaron excavaciones arqueológicas. Las vertientes interiores del cráter han desafiado a la erosión del viento y del agua, gracias a los bosques de encinas y robles que allí han prosperado. 

Posible menhir en el Volcán de Santa Margarida - Foto: guiarte.com

Vista aérea del volcán - Foto: mascantallops.com

2 comentarios:

  1. Buenas, Argantonio;

    Continuo siguiendo asiduamente tu blog, y vuelvo a felicitarte de nuevo por tus entradas tan interesantes.

    Respecto al volcan de Santa Margarida, hice una entrada en diciembre de 2014 y la quise relacionar con un culto mundial al vulcanismo http://elsomnideladeessaterra.blogspot.com.es/2014_09_01_archive.html

    El menhir, tal como hago referencia en esa entrada, fue arrancado y abandonado cerca de la ermita... No se si actualmente continuará tirado, o si por el contrario habrán tenido en cuenta los comentarios que hice llegar al servicio del parque natural para que lo volvieran a poner en su sitio original...

    Desconocía la existencia de un gran dolmen en el lugar donde se construyó la ermita. Un dato más que refuerza la gran consistencia de cultos paganos que fueron cristianizados en la Edad Media...

    Muchas gracias por tus entradas y tu constancia.

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    1. Muchas gracias, Manel, por escribir y darnos a conocer tu estudio. Muy interesante esa hipótesis, además de tu blog, que por cierto me guardo en favoritos. Está claro que es en los volcanes donde el ser humano encuentra uno de los fenómenos, junto a otros, más impactantes que puede producir la Tierra, y eso no podía pasar desapercibido a nuestros antepasados.

      Gracias a ti también por tu trabajo y nos leeremos entonces, amigo.

      Un abrazo.

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