lunes, 27 de agosto de 2018

La Pisá del Moru, Cerezal-Nuñomoral

Traemos este curioso podomorfo, gracias a Félix Barroso Gutiérrez, el gran estudioso de la comarca hurdana a la que volvemos otra vez, aunque sea virtualmente en el blog (ya nos gustaría volver físicamente, pues hace tiempo -tres años- que no repetimos visita a esta comarca de tan fuerte personalidad). Según cuenta el propio Félix, no se sabe, a ciencia cierta, si nos encontramos ante un verdadero podomorfo de factura humana o fue la propia Naturaleza, que ya sabemos que es la mayor de las artistas, la creadora. Se encuentra en el paraje conocido como El Golleti, perteneciente a la alquería de Cerezal, en el concejo de Nuñomoral -se puede decir que en pleno corazón de la comarca, sin que se nos enfaden el resto de bellos concejos hurdanos-. Félix tiene sus dudas en cuanto al "podomorfo" en cuestión, puesto que se diferencia bastante del resto de podomorfos existentes por las sierras hurdanas, que no son pocos, además, estos sí, claramente, de factura humana.

La Pisá del Moru de Cerezal - Foto: Félix Barroso Gutiérrez, 11/08/2018

Pero ya sea verdaderamente de creación humana o no, lo cierto es que a la figura, con el devenir de las generaciones, se le ha otorgado su "aureola legendaria", en expresión del propio Félix. Más de un hurdano, como bien apunta el mencionado investigador, al que tengo el gusto y el honor de conocer, seguramente imaginó que podría ser una pisada del propio Jáncanu, ese personaje mitológico hurdano, del que ya hemos hablado por aquí, y que se puede asociar, claramente, con los cíclopes y demás personajes monstruosos de grandes dimensiones, que no sólo se dan en la mitología clásica grecorromana, sino en buena parte de las mitologías indoeuropeas, entre las que se encuentra la propia y rica mitología hurdana. Esto, con respecto a los hurdanos más cercanos en el tiempo, pero bien pudiera haber sido, igualmente, objeto de culto para otros hurdanos mucho más lejanos -cuando Las Hurdes, evidentemente, no habían sido aún 'bautizadas' con su bello topónimo-, que pudieran perderse en la noche de los tiempos, ...en la propia Prehistoria. No hemos dicho, aún, que el podomorfo es conocido como La Pisá del Moru, con la gran pista o indicio que supone, en sí misma, la denominación de moro, mora, encantada, mouro, moura, etc (según el lugar ibérico en el que nos encontremos), para rastrear lugares de antiguos cultos, como en reiteradas ocasiones hemos apuntado por aquí.


domingo, 26 de agosto de 2018

El Cabo Norfeu y sus cultos órficos, Rosas

Nos acercamos a un lugar, que como otros muchos promontorios o cabos peninsulares, tuvieron un significado de alto contenido espiritual para nuestros antepasados. Nos referimos al Cabo de Creus y a todo su entorno, el cual se encuentra encuadrado en lo que se conoce, institucionalmente a día de hoy, como Parque Natural del Cabo de Creus. Las pruebas, de esta afirmación, en relación al Cabo de Creus se encuentran en el importante número de dólmenes y megalitos en general existentes en dicho cabo y su entorno, además de importantes centros espirituales del Medioevo, que seguramente suponen la sobreposición de anteriores templos y cultos, como el monasterio románico de Sant Pere de Rodes. Cuenta la leyenda -no sabemos la antigüedad de la misma, pues es muy posible que sea de reciente creación o, lo que es lo mismo, que no vaya más allá del periodo romántico decimonónico- que en la Sierra de Roda, donde se sitúa el monasterio, el héroe de la mitología griega Herakles -el Hércules romano- enterró a la princesa Pirenne, la cual dio nombre a los Pirineos, leyenda de la que ya nos hicimos eco, en el blog, hace tiempo.
Pero hoy nos acercamos al Cabo Norfeu, que corta al norte, el golfo de Rosas -Roses en catalán- y que se halla dentro del propio parque natural. El investigador Octavi Piulats nos cuenta que en el Cabo Norfeu hubo un templo dedicado al personaje mitológico de Orfeo, de ahí el nombre del propio cabo, en el cual se practicaron los conocidos como misterios órficos. Confiamos en la veracidad de este investigador, pero desconocemos las fuentes en las que se ha basado para realizar dicha afirmación, más allá del propio topónimo del cabo; de este modo, abrimos, desde aquí, como siempre el debate e invitamos, además de agredecer, a cualquier persona a que aporte más información al respecto.

El Cabo Norfeu al fondo - Foto: fotos.costabrava.org

Fuente: Octavi Piulats -octavipiulats.com-

Otro lugar sagrado del parque se localiza en una lengua de tierra que entre Rosas y Cadaqués penetra casi 3 km en el mar terminando en un abrupto despeñadero, nos referimos al Cap Norfeu, cuyo nombre catalán significa Cabo de Orfeo, llamado así porque en su centro los griegos de la ciudad helena de Ampurias construyeron un templo al bardo Orfeo, y en sus cuevas es posible que se practicase los ritos órficos o sea la religión de los misterios. 


viernes, 24 de agosto de 2018

La montaña sagrada del Canigó, Rosellón

Tras un parón estival en el blog, volvemos con un interesante testimonio de festejo de celebración del Solsticio que inicia el periodo estacional en el que aún nos encontramos y lo hacemos visitando, por primera vez, lo que se podría considerar un lugar externo o extraño al ámbito geográfico de este blog, pues el enclave en concreto, pertenece al Estado francés, no encontrándose dentro de los estados español o portugués, que son, como es de notorio conocimiento, entre los que se divide el territorio peninsular. Hablamos del macizo o montaña del Canigó -Canigou en francés-.
A pesar del apunte que acabo de realizar, hemos de decir, que tanto cultural, como incluso geográficamente, esta montaña tiene una clara vinculación con la Península Ibérica, pues pertenece a la cordillera pirenaica, que une o divide, según se vea, a la Península con o del resto del continente europeo, por tanto, podría considerarse, en un sentido amplio, perteneciente por igual al territorio de la antigua Iberia y al de la antigua Galia, a pesar de encontrarse en la vertiente meridional pirenaica; pero, lo que es aún más importante, desde un punto de vista antropológico, tiene una clara vinculación cultural con uno y otro lado de la cadena montañosa pirenaica, pues en ella se celebra un ritual de marcada y clara vinculación catalana, como el propio nombre de la montaña, con lo que, desde ese punto de vista, hemos considerado interesante traer a Iberia Mágica a este enclave, a pesar de que pudiera no pertenecer, como hemos apuntado, o considerarse que no pertenece al ámbito geográfico ibérico. El festejo, en cuestión, es conocido como La Flama del Canigó. Evidentemente el ritual de encender hogueras en las fechas del Solsticio en la cima de esta montaña, nos hace sospechar que nos encontramos ante una montaña divinizada o sacralizada, seguramente, desde bien antiguo, a pesar de que la costumbre de distribuir el fuego por el actual territorio catalán, más allá de la frontera francesa, sea de reciente creación.

El Canigó - Foto: france-voyage.com

Fuente: lameva.barcelona.cat

La Flama del Canigó es un ritual cada vez más arraigado y popular. Se mezcla con la celebración de San Juan para evocar la identidad común de las tierras de habla catalana.
El fuego de la Flama del Canigó no se apaga nunca: durante todo el año se queda en el Castellet de Perpiñán hasta que, el 22 de junio, se lleva hasta la cima del Canigó. A la medianoche en punto, el fuego de la Flama se distribuye entre los presentes. Acto seguido empieza el recorrido, en el que se va expandiendo y desdoblando para encender las hogueras de San Juan de centenares de poblaciones.
La Flama del Canigó se va diseminando a pie, en coche, en bicicleta, en barca, a caballo o con cualquier medio de transporte posible, y llega a todos los rincones gracias a una gran diversidad de colectivos y entidades. Cada pueblo, villa o ciudad organiza el recibimiento de la Flama a su manera: con música, diablos, danza... 

Territorio del Rosellón -en catalán Rosselló, en francés Roussillon-